Restauración

Conservación y Restauración

La conservación y la restauración de bienes son dos disciplinas que tienen como objetivo preservar y transmitir el patrimonio cultural y artístico a las generaciones futuras. En ellas, se pueden distinguir tres conceptos importantes:

  • Conservación preventiva
  • Conservación curativa
  • Restauración

La conservación preventiva consiste en realizar actuaciones indirectas sobre la obra, de manera que eviten y minimicen su degradación o futuro deterioro. Es decir, se interviene en el entorno o contexto donde se encuentra, eliminando cualquier riesgo, en la medida de lo posible, que haya en el factor externo del bien, sin modificar su apariencia.

La conservación curativa es una intervención directa sobre una obra en peligro y que, a veces, puede modificar su apariencia física. Se lleva a cabo cuando la pieza se encuentra en un estado de fragilidad y riesgo evidente y, es necesario detener ese factor o proceso dañino para su salvaguarda.

La restauración abarca todas las acciones directas que se realizan para una correcta lectura de la obra cuando ha perdido parte de su función o significado, mediante procesos que la han alterado. Estas intervenciones, que suelen modificar la apariencia, siguen una serie de criterios vigentes que se basan en principios como, la mínima intervención, respeto a la integridad y autenticidad histórica de la obra, la reversibilidad de los materiales utilizados en su restauración, etc.

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